Un hombre camina como cada tarde por la vereda de un hospital e ignora la pesadilla que lo espera; un médico que parece dócil ante el infortunio se revela duro y sombrío; un represor descubierto por sus víctimas se enfrenta a una humillación interminable; una perra es ejemplo de lealtad y valor ante una plaza repleta de resignados y cobardes; un presidiario hace de su silbo una gesta de sublevación y libertad.
Con escritura diáfana y directa, los cuentos de Mempo Giardinelli abrillantan el lado oscuro de la vida de manera serena y luminosa. Que es al cabo el modo más certero, y también el más astuto, de narrar historias de pasión y de muerte.
Chaco For Ever es una muestra de su calidad como cuentista, talento a menudo olvidado frente a la omnipresencia de sus novelas. Reúne relatos publicados, ya clásicos, y varios inéditos. Lo que es un dato accesorio, porque todos se leen con el mismo placer, con ese asombro dichoso que provoca la mejor ficción.
Un hombre camina como cada tarde por la vereda de un hospital e ignora la pesadilla que lo espera; un médico que parece dócil ante el infortunio se revela duro y sombrío; un represor descubierto por sus víctimas se enfrenta a una humillación interminable; una perra es ejemplo de lealtad y valor ante una plaza repleta de resignados y cobardes; un presidiario hace de su silbo una gesta de sublevación y libertad.
Con escritura diáfana y directa, los cuentos de Mempo Giardinelli abrillantan el lado oscuro de la vida de manera serena y luminosa. Que es al cabo el modo más certero, y también el más astuto, de narrar historias de pasión y de muerte.
Chaco For Ever es una muestra de su calidad como cuentista, talento a menudo olvidado frente a la omnipresencia de sus novelas. Reúne relatos publicados, ya clásicos, y varios inéditos. Lo que es un dato accesorio, porque todos se leen con el mismo placer, con ese asombro dichoso que provoca la mejor ficción.